Tarta semifría de stracciatella con glaseado espejo de chocolate blanco

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La tarta semifría es una preparación de origen italiano, que consiste básicamente en presentar tartas y postres semi helados, se consigue una textura diferente a las tartas sin horno habituales.

Hoy te enseño a elaborar una riquísima tarta semifría de mousse de stracciatella, tiene una textura suave y cremosa, cubierta por un delicioso glaseado espejo de chocolate blanco, ahora que ya empieza el calor, apetece tomar tartas frías que dejamos en la nevera hasta el momento de degustarlas.

Espero que os animéis a probarla, porque esta tarta es tan rica que triunfarás con ella allá donde la presentes, les encantará a todos!

 

 

(Para un molde redondo de corona de silicona de 23 cm)

 

Ingredientes:

400 ml. de nata para montar o crema para batir muy fría (35% M.G).

250 grs. de yogur natural griego sin azúcar a temperatura ambiente.

100 grs. de azúcar.

50 ml. de agua.

10 grs. de gelatina o grenetina en polvo (sin sabor).

60 grs. de chocolate negro picado.

 

Ingredientes para el glaseado espejo de chocolate blanco:

120 ml. de agua.

150 grs. de azúcar.

100 ml. de leche condensada.

150 grs. de chocolate blanco picado en trocitos muy pequeños.

10 grs. de gelatina o grenetina en polvo sin sabor.

Colorante alimentario en pasta o en gel de color blanco (opcional).

 

Ingredientes para la decoración:

Sprinkles.

Almendras caramelizadas crocanti.

 

 

 

Preparación:

Echamos la gelatina en polvo en el agua fría, mezclamos bien y dejamos reposar 10 minutos.

Engrasamos el molde con spray desmoldante o aceite de girasol, reservamos.

Batimos la nata a velocidad media alta (la nata, el bol y las varillas tienen que estar muy fríos), cuando empiece a espesar añadimos el azúcar y seguimos batiendo hasta semimontar la nata, reservamos.

A estas alturas la gelatina ya habrá absorbido todo el agua, si es así derretimos en el microondas 15 segundos y la añadimos al yogur, mezclamos bien hasta integrarla, seguidamente agregamos esta mezcla a la nata y batimos hasta integrarla.

Añadimos el chocolate picado y mezclamos con una espátula hasta repartirlo por toda la mezcla, vertemos en el molde, damos unos golpesitos al molde sobre la encimera para asentar la mezcla y alisamos la superficie.

Metemos en el congelador hasta el día siguiente, al día siguiente la desmoldamos y reservamos en el congelador mientras hacemos el glaseado espejo.

 

 

 

Preparación del glaseado espejo de chocolate blanco:

Echamos la gelatina en polvo en un bol y le agregamos tres cucharadas soperas del agua de la receta, mezclamos bien y dejamos reposar 10 minutos.

En un cazo echamos el resto del agua, la leche condesada y el azúcar, ponemos a fuego medio y sin dejar de remover dejamos hasta hervir, en esté punto bajamos el fuego al mínimo y añadimos la gelatina que ya habrá absorbido todo el agua, mezclamos hasta disolverla por completo, a continuación agregamos el chocolate blanco, mezclamos hasta que se derrita y se integre por completo, apartamos del fuego y añadimos el colorante alimentario poco a poco hasta conseguir el color deseado (el colorante es opcional, pero el chocolate blanco le da un color amarillento al glaseado y sí quieres que te quede de color blanco como el mío, tendrás que utilizar colorante).

Vertemos el glaseado en una jarra pasándolo por un colador, cubrimos con papel transparente (film) de forma que esté en contacto con toda la superficie del glaseado (así evitaremos que se seque la parte superior), dejamos templar, si tienes un termómetro de cocina, el glaseado estará listo cuando esté entre 32° y 37° grados.

Una vez listo el glaseado, sacamos la tarta del congelador, la ponemos sobre una rejilla con un plato debajo y vertemos el glaseado por encima hasta cubrir la tarta por completo, limpiamos los bordes de la tarta arrastrandola por la rejilla con la ayuda de dos espátulas y la trasladamos al plato o stand donde la vamos a presentar, por último decoramos a nuestro gusto con los splinkles y las almendras caramelizadas crocanti.

Metemos la tarta en la nevera un mínimo de dos horas, para que se descongele y recupere su textura de mousse y ya la tendremos lista para servirla y disfrutarla.

 

 

2 comentarios en «Tarta semifría de stracciatella con glaseado espejo de chocolate blanco»

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