El helado de vainilla es todo un clásico, siendo el acompañante perfecto de otros postres, como la tarta de chocolate, el brownie o el coulant de chocolate.
Esta receta es muy fácil y rápida de hacer, con pocos ingredientes, sin heladera y sin colorantes ni conservantes.
Un helado casero con un dulce sabor a vainilla y muy cremoso, ideal para disfrutarlo en las tardes de verano o como postre de una comida.
¡Os encantará!
Ingredientes:
400 ml. de nata para montar o crema para batir muy fría (35% M.G).
200 grs. de leche condensada.
125 grs. de yogur de vainilla.
2 Cdtas. de pasta o extracto de vainilla.
Virutas de chocolate de caramelo para decorar.
Preparación:
Echamos en un bol la leche condesada, el yogur y la vainilla, mezclamos hasta integrarlo todo.
Batimos la nata hasta que esté bien montada y firme (la nata, el bol y las varillas tienen que estar muy fríos).
Agregamos la mezcla de leche condensada y yogur, mezclamos con una espátula con movimientos envolventes hasta integrarla.
Vertemos la mezcla en un recipiente, alisamos la superficie y decoramos con las virutas de chocolate.
Tapamos y metemos en el congelador hasta el día siguiente.
Al día siguiente sacamos del congelador 20 minutos antes de consumirlo.
Pasado el tiempo, ya lo tendremos listo para sacar bolas y disfrutarlo.